Me dueles en mis párpados sumidos,
en mi soledad a la que le faltan tus ojos,
me dueles como le duele a una madre
la crucifixión de un hijo.
El tiempo pasa, el amor queda,
tu ausencia alarga el infinito
y me duele un beso
tantas veces retratado
en el jolgorio de tus erizados bustos.
Me dueles en mi alma de niño que desperté contigo,
en las tardes frías y solitarias de domingo
donde te sufro sentado en una esquina
que ya no es más parte de tu camino.
Me dueles cuando se inicia marzo,
al recordar la inocencia del
primer beso que nos dimos.
Debe ser tu sombra la que me duele tanto,
la llevo en hombros durante el día
y cuando cae la noche se escurre testaruda
entre los bordes de mi pensamiento,
allí donde está dibujada tu figura.
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EL OCASO DE LA TRISTEZA (Octavo Capítulo)
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bueno aunque solo sea la chica de la limpieza jeje la k te inspira es bueno tenar a alguien cerca en los malos monentos. felicitaciones Marco buen comienso
ResponderEliminarmuy buena , la imagen da un buen impacto de lo que quieres expresar. felicitaciones
ResponderEliminarquenlindos poemas, la verdad me hacen sentir en el alma y el corazon , y las historias me hacen sentir bien
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