lunes, 16 de noviembre de 2009
EL ESPECIALISTA
Hoy me desaceré de ella. ¡Sí! ¡Tiene que ser hoy! Aunque disfruto acariciándola en la mañana, debo admitir que en los últimos días ha estado insoportable y simplona. Habrá quienes me den la razón en esta quisquillosa empresa; otros, alimentados por la sensiblería, me invitarán a meditarlo un poco y sugerirán una buena moldeada como solución, antes que desaparecerla. Por eso no he dejado suelto el rumor de lo que haré. Eso sí, debo actuar con prisa, antes de que el sentimentalismo me abroche con su camisa de fuerza e impida que lleve a cabo mi plan. En la agenda del celular está grabado el número de Roy, él es todo un especialista en este tipo de cosas y hará el trabajo por mí, pues debo admitir que tanto coraje no tengo para obrar contra ella, ya que por el tiempo compartido siento que la extrañaré cuando ya no esté.
- ¿Roy tendrás tiempo esta tarde? Necesito una cita.
- Claro Jhon. Estoy libre a las seis. ¿Acabarás al fin con ella?
- ¡Así es! Y tiene que ser hoy.
- Será como tú dices amigo. Esta tarde desapareceremos tu feroz barba.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
EL OCASO DE LA TRISTEZA (Octavo Capítulo)
VIII “Porque no es nuestra pelea solamente contra hombres de carne y sangre: sino contra los príncipes, y potestades, contra los adali...

-
VI Dieron las cuatro de la tarde del día siguiente al hallazgo del muñeco decapitado; a esa hora estuve listo para subir al gimnasio y ...
-
II La mañana siguiente al hallazgo del paquete abrí los ojos y sentí el cuerpo tibio de Luz a mi costado. Traía puesto uno de mis polos...
-
VIII “Porque no es nuestra pelea solamente contra hombres de carne y sangre: sino contra los príncipes, y potestades, contra los adali...
No hay comentarios:
Publicar un comentario